El equipo de Marcelo Gallardo arrancó con el pie derecho en la Copa Libertadores al imponerse por la mínima ante Universitario en Lima. La primera mitad mostró a un River dinámico y con buen juego, pero en el complemento sufrió y tuvo que resistir con firmeza.
Uno de los puntos de inflexión en el rendimiento del equipo fue la presencia de Kevin Castaño. El colombiano, que ya había dejado buenas sensaciones en el duelo ante Rosario Central, le aportó fluidez y claridad al mediocampo, permitiendo que sus compañeros se soltaran y el equipo encontrara una identidad más definida. Con él en cancha, River dejó atrás la monotonía y logró darle sentido a la posesión. Su influencia se hizo notar en el circuito ofensivo, donde jugadores como Meza, Colidio y Mastantuono lograron mayor protagonismo, mientras que Driussi encontró espacios para generar peligro.
Desde lo táctico, Gallardo sorprendió con un esquema flexible. Apostó por un 4-3-3 dinámico que complicó a Universitario, que nunca logró encontrar referencias claras en ataque ni en defensa. La movilidad de Driussi como falso 9 y la constante participación de Colidio desarmaron a la zaga peruana, permitiendo a River imponer condiciones.
El único gol del partido llegó desde una jugada de pelota parada, cuando Paulo Díaz aprovechó un centro para abrir el marcador. River tuvo oportunidades para aumentar la ventaja en la primera mitad, pero la falta de puntería lo impidió.

En el segundo tiempo, el trámite cambió. Universitario adelantó líneas y puso en aprietos a River, que perdió fluidez y tuvo que ajustar. Gallardo reaccionó con modificaciones clave, como el ingreso de Simón y Borja para equilibrar el partido y darle oxígeno al equipo. Sobre el final, Armani fue determinante con un par de intervenciones que aseguraron los tres puntos.
Más allá del resultado, River dejó buenas sensaciones en su estreno copero: mostró fútbol cuando tuvo la oportunidad y supo sufrir cuando el partido lo exigió.
Con este triunfo, el equipo empieza a recuperar su mejor versión y a demostrar que está listo para pelear en el torneo más exigente del continente.